Despejando la incertidumbre
– ¿Hace días que no la veo, Toñita? ¿cómo ha estado? Le dijo la mesera a la mujer que todos los días va a comer.
– Es que tuve un accidente en el trabajo, me moche dos dedos de mi mano ¿usted cree? por eso traigo estas vendas.
– ¡Doña Toñita! ¿pues qué le pasó?
– Metí los dedos en la cortadora por estar distraída, pero no se apure, aún puedo seguir usando mis dedos. Me dieron incapacidad por eso no había venido, hasta me fui a Cancún – sonrío la mujer, como si hubiera librado una gran hazaña por haber perdido sus dedos.
Esta es una conversación real que escuchó mi hija mayor. Lo preocupante de la plática es la escasa conciencia que tenemos de los accidentes de trabajo, hoy fueron los dedos, mañana otra extremidad o la muerte, quizás.
Es cierto, que en gran medida somos las personas quienes cometemos actos inseguros que nos pone en riesgo de lesiones graves o de la muerte ¿cuál es fondo de estas reacciones? ¿nos queremos tan poco? ¿es falta de autoestima? Enfoquemos el tema hacia otro lado: qué hacemos para generar conciencia, no solo en el uso del equipo de protección, sino en el alertamiento cuando manejamos herramientas de alto riesgo.
Cambiar el enfoque hacia la prevención de accidentes de trabajos, requiere obviamente, de la participación de la empresa y el trabajador. Preparar a la empresa en el cambio de enfoque es una misión que debe hacerse de manera planificada, organizada y gradual para sistematizar los procesos de prevención de accidentes de trabajo y la toma de conciencia de las y los trabajadores en todos los niveles de la organización. En este sentido es que la norma ISO-45001:2018 de Seguridad y Salud de los Trabajadores toma relevancia para prevenir accidentes laborales. La principal orientación de esta norma se basa en lo siguiente:
- 1. Identificar y evaluar los peligros y riesgos de la seguridad y salud de los trabajadores asociadas a las actividades que desempeñan junto con el cumplimiento legal en materia de seguridad y salud.
- 2. Definir e implantar los controles operacionales basados en los peligros y riesgos, y en el cumplimiento legal.
- 3. Definir e implantar planes de emergencia para atender la seguridad y salud de los trabajadores. Estos planes deben desarrollarse con base en los peligros y riesgos que se evaluaron, un ejemplo de estos planes son las fugas, contacto con sustancias peligrosas, los brotes de influenza o de COVID-19, por exponer algunos.
- 4. Programa permanente de concientización sobre los peligros y riesgos. En este punto es importante hacer hincapié que la empresa debe buscar estrategias creativas para mantener la conciencia de las personas en la prevención de accidentes y evitar los actos inseguros en el desarrollo de sus actividades.
Las herramientas de mejora son de utilidad para el análisis de los accidentes de trabajo, el propósito es obtener información sobre las condiciones del entorno laboral y las estrategias de implementación para prevenir accidentes y no para echar culpas o criticar la conducta de las personas.
La prevención de los accidentes y la salud de las y los trabajadores, es una tarea continua, tanto en la identificación de nuevos peligros como de la creatividad para tener mejores prácticas y conciencia en la prevención. Hay empresas que prefieren pagar altas primas por accidentes que implementar controles para la prevención. El camino hacia la conciencia en la prevención de accidentes y de salud en el trabajo, es el liderazgo y el compromiso palpable por parte de toda la organización.
Por último, aunque no sabemos aún cuál será el comportamiento de la pandemia por la COVID-19 en este 2022, es importante no bajar las medidas de prevención y seguir con los protocolos, la guía ISO-COVID 19 es un complemento de la norma ISO-45001:2018 que orienta a las empresas en la prevención y atención de los brotes.