Despejando la incertidumbre
Según un estudio de la Organización Panamericana de Salud que publicó en 2016, menciona que después de una epidemia las personas podemos expresar conductas como el miedo a una nueva pandemia, conductas agresivas y de protesta contra autoridades e instituciones, actos de rebeldía o delincuenciales, depresión, estrés postraumático, abuso en el consumo del alcohol y drogas y violencia hacia compañeros o familiares, entre otras consecuencias que menciona el documento.
El regreso a las actividades presenciales después de estar casi 2 años en confinamiento conlleva nuevos riesgos para los trabajadores. Elementos como la pandemia, el riesgo del contagio y hasta el trabajo vía remoto han sido factores de riesgo psicosocial, generando estrés, angustia, ansiedad y hasta insomnio. Las obligaciones patronales de prevenir factores de riesgo psicosocial siguen vigentes y también los plazos para cumplir con la NOM 035, una norma que busca prevenir elementos en el entorno organizacional que pueden dañar la salud mental de los trabajadores, las organizaciones deben tomar conciencia de cuáles serán los efectos que se manifestarán ahora que comenzamos a regresar poco a poco a nuestras actividades. La NOM-035-STPS-2018 que además de ser obligatoria, es una herramienta de análisis para la prevención y mitigación de los riesgos psicosociales.
Ya sea que la organización realizó antes de la pandemia un análisis y estrategias de los riesgos psicosociales o no lo ha llevado a cabo aún, se vuelve esencial en esta época aplicar la NOM-035 STPS. La NOM 035 nos permite vislumbrar los efectos potenciales de las conductas que podemos expresar al volver a los centros de trabajo.
La aplicación de la NOM-035 STPS produce consecuencias benéficas no solo en la identificación de los riesgos psicosociales, sino que ayuda a las organizaciones a que las personas continúen siendo productivas y se comprometan aún más con los objetivos de la organización, cuando se brinda un lugar donde el clima y cultura organizacional comprende la situación adversa que se vivió, éstas y otras acciones hacen que la imagen corporativa se fortalezca.